La salud emocional también es salud

Si tenemos en cuenta que aproximadamente el 90% de las dolencias físicas que presentan las personas a las que acompaño en terapia, cuentan con un conflicto emocional no resuelto que las genera y alimenta, la conclusión es clara: el dolor suele ser el síntoma, el desequilibrio emocional, la raíz.

Desde este paradigma, ya sobradamente conocido en Oriente por diversas corrientes, algunas de ellas con una antigüedad de 8500 años. La realidad que acontece nos invita a la reflexión sobre qué medios estamos poniendo a disposición de un cuidado efectivo de nuestra salud, más allá de las pastillas para dormir, los ansiolíticos, antidepresivos… y demás recursos, supuestamente temporales, que terminan condicionando y limitando nuestras vidas, además de no solucionar definitivamente el problema.

Por otra parte, las estadísticas oficiales en España reflejan el mayor índice de suicidios registrados entre la población, en el rango de edad que va de los 15 a los 35 años. Un dato significativo y alarmante, que una vez más pone de manifiesto que “algo se nos debe estar escapando”. Y lo que se escapa, tengo oportunidad de comprobarlo a diario: solo atendemos nuestra salud cuando la dificultad física es tan grande que nos imposibilita cubrir nuestras necesidades básicas o cuando ya es demasiado tarde.

De ahí esta invitación en forma de artículo… pongamos el foco en resolver la raíz de la enfermedad, o el problema no solo no se resolverá, sino que, a la luz de los datos anteriormente citados, no parará de crecer.

Mi nombre es Enrique Ramos, soy Terapeuta Emocional y te invito a sentir de primera mano de lo que hablo a través de mi cuenta de Instagram: @enriqueramoscoach.

Muchas gracias y mucha Salud Emocional para poder disfrutar de verdad del dinero, del amor y de la vida, en definitiva.

Enrique Ramos
Terapeuta Emocional